En el sofocante calor del verano indio, la búsqueda de una bebida refrescante es una experiencia cultural por derecho propio. En el vasto paisaje de la India, las bebidas se elaboran meticulosamente para contrarrestar el implacable calor, ofreciendo hidratación y una mezcla de sabores, tradiciones y beneficios medicinales profundamente arraigados en el patrimonio del país.
Una de estas bebidas, transmitida de generación en generación, es el shikanji, una limonada ácida y especiada que tiene un gran poder. El equilibrio perfecto de sabores ácidos, salados y picantes, a menudo realzados con comino tostado, sal negra y una pizca de menta, la convierten en la bebida por excelencia para contrarrestar el sol del mediodía.
También está la Jaljeera, una bebida con sabor. Picante, ácida y rebosante de la audacia del comino, la menta y, a veces, incluso un toque de pimienta negra, esta bebida es tanto un tónico digestivo como una bebida para calmar la sed. Sus atrevidos sabores limpian el paladar, vigorizan el cuerpo y asientan el estómago. La jaleera tiene la capacidad única de despertar los sentidos con su excepcional sabor picante.
Para los que necesitan algo más sustancioso, entra en juego el Sattu Sharbat. Esta bebida, elaborada con harina de gramo tostada, ha sido un alimento básico durante siglos. En el calor del verano, sobre todo en las áridas tierras de Bihar y Uttar Pradesh, los campesinos y jornaleros han confiado durante mucho tiempo en el Sattu para sostenerse durante las largas y agotadoras jornadas bajo el sol inclemente. Esta bebida abundante y nutritiva está repleta de proteínas y minerales que ayudan a reponer el organismo.
El chuak, una cerveza de arroz tradicional de Tripura, en el noreste de la India, es una adición única al repertorio convencional de bebidas veraniegas. Elaborada mediante la fermentación del arroz, esta bebida ligeramente alcohólica suele disfrutarse durante los meses de verano de la región. En Tripura, suele elaborarse en casa y compartirse entre amigos y familiares, marcando los lazos de la comunidad, la tradición y la hospitalidad. Con sus profundas raíces en las costumbres tribales, el Chuak añade un elemento refrescante y terrenal a la diversa cultura de la bebida de la India.
Por último, está el Aam Panna, una bebida ácida, dulce y ligeramente picante. Elaborada con mangos crudos, esta bebida es conocida por su capacidad para combatir la insolación, una afección común en los intensos veranos de la India. El aam panna existe desde hace siglos, y originalmente lo tomaban la realeza y los soldados para refrescarse y mantenerse hidratados durante largas batallas o arduos viajes. Es un brebaje agridulce que combina pulpa cruda de mango, comino tostado, sal negra y un toque de jengibre, que no sólo refresca sino que rejuvenece. Es la bebida que despierta la nostalgia en todos los indios. Todo el mundo jura que sus propiedades medicinales son imprescindibles en verano.
Las bebidas veraniegas de la India para calmar la sed están ligadas a la tierra y son esenciales para el ritmo de las estaciones. Son una oda a la diversidad de paisajes, climas y culturas de este vasto país. Tanto si se disfrutan en una bulliciosa ciudad como en un tranquilo pueblo, cada bebida está impregnada de tradición, sabiduría y una profunda conexión con la tierra. Así que, la próxima vez que se encuentre en medio de un caluroso día de verano, considere la posibilidad de tomar una de estas bebidas de gran riqueza cultural. Saboree la historia, saboree la tradición y recuerde cómo generaciones de sabiduría han dado forma a lo que bebemos hoy.